CADA VEZ se me hace más pesado vestir de hombre, las raras veces en que todavÃa lo hago. Esta mañana me he puesto mis botas altas negras, unos pendientes exagerados y un vestido amarillo, y al mirarme sin querer en el espejo, me he sorprendido un montón: ¡qué guapa estoy!, me he dicho, pero no era guapura lo que veÃa, sino comodidad, autoafirmación, naturalidad. Cada vez que salgo vestido de hombre, me pasa que camino por la calle desgarbado, cheposo, como un ser desahuciado de la sociedad; es vestirme de Vanessa y empiezo a caminar erguida, balanceante, feliz de la vida, como si me estuviera comiendo el mundo.
Hoy he pensado esto, quizá sea una tonterÃa pero para eso se escribe un diario: he pensado que en el futuro lejano, si la igualdad se va haciendo efectiva, los hombres van a terminar vistiendo como las mujeres. Se caminará hacia lo unisex, pero lo unisex será 90% femenino, porque lo femenino, en cuestiones de vestimenta o estética o perfume, es muy superior. Los hombres no pueden seguir haciéndose tanto daño, es insostenible seguir vistiendo de cadáveres por culpa de las pautas culturales. Cuando veo las reuniones de polÃticos en la UE, donde una mujer con tan poco sex-appeal como Angela Merkel, por el solo hecho de incorporar el color a su vestuario, parece Rita Hayworth al lado de sus compañeros grises, militares, uniformados, me suelo preguntar: ¿Es que no se dan cuenta? ¿Hasta cuándo los hombres van a insistir en ESTO?
…de hecho, en los pequeños cortos que ruedo en mi cabeza para mis masturbaciones, tuve uno muy recurrente en el pasado en el que sucedÃa esto: conocÃa a una chica con el mismo número de pie que yo, la misma talla de pantalón, la misma de camisa… y como ella estaba abierta a mis travestismos, al final decidÃamos tener un solo armario y toda nuestra ropa era de mujer. Volviendo a mi idea de arriba, no me parece del todo estúpido que en el futuro haya parejas (supongo que ya las habrá ahora, aunque pocas) que tengan un solo armario y toda la ropa sea susceptible de ser vestida por los dos.